viernes, 3 de enero de 2014

Y sobre la Seda Salvaje o Dupión...

Parece que muchos estudiosos están de acuerdo en que la seda salvaje es un tejido de la era industrial. Si bien no se admite como tejido histórico en la mayoría de blogs de indumentaria histórica, esto es discutible. Hay un libro titulado "The Silk Industry in Renaissance Venice" del historiador Luca Molà, en el que se trata este tema y se documenta que un tipo de seda de peor calidad, hecha con capullos rotos ha existido por lo menos desde el Renacimiento. Lo único que advierte es que no se sabe con certeza si el acabado era idéntico al que se obtiene ahora industrialmente (¿y? ¿acaso existe un tejido hoy que tenga el mismo proceso y acabado que siglos atrás?). Además, aunque no he conseguido conocer la fuente (mala costumbre de no citarlas, aunque seguramente proceda del libro de Molà), también he encontrado la siguiente información: 

"In 18th century Europe dupion was imported at half the price of good quality silk: most definitely an inferior product. In France the use of dupion for stockings or bonnet-making was prohibited by regulations published in 1743"

"Dupion as we know it now was invented in the mid-nineteenth century, when it was considered a cheap and slightly naff alternative to grown-up, un-slubbed silks like taffeta. There is, however, evidence that weaves similar to dupion were in use by the sixteenth century.

Al ser una seda de peor calidad, no se solía usar para trajes, sino más bien para complementos y como fondo en brocados, por lo que no parece que se conserven buenos ejemplos supervivientes. No obstante, existen ejemplos históricos con una textura muy similar, en los que se aprecian claramente las estrías, tal como la seda salvaje que conocemos, aunque la técnica de elaboración fuera seguramente distinta (insisto, hoy en día no hay tejido que podamos comprar que esté producido con la misma técnica y materia prima que antaño, por lo que siempre habrá diferencias).




Una nota sobre mis materiales

No quería dejar de aclarar que algunos de los materiales usados en mis confecciones no son 100% históricos por dos razones: 

- Mi poder adquisitivo para caprichos tiene un límite. Con esto quiero decir que obviamente no voy a costear sedas, encajes, piedras preciosas, etc. para todas y cada una de mis creaciones, aunque haga todo lo posible por emplear material histórico. Tampoco me limito a recrear ropa de campesina, puesto que mi interés abarca todos los estratos sociales. 

- Soy una defensora de los derechos de los animales. Yo me tomo muy en serio el rigor histórico, pero me niego rotundamente a usar pieles de animales, marfil y otros materiales que impliquen su sufrimiento por el simple hecho de adornar. Sólo empleo el cuero por ser un subproducto del consumo alimenticio y la seda en contadas ocasiones al no encontrar un sustituto posible. Intento usar seda salvaje u otras alternativas libres de crueldad en la medida de lo posible. 

(De todos modos, no le debo explicaciones a nadie).